Correr en ayunas, ¿una locura o un hábito saludable?

Muchos personas señalan que una manera muy efectiva de quemar grasas es ir a correr sin desayunar (en ayunas) por la mañana recién levantados. Esta forma de correr es alabada por muchas personas para conseguir la ansiada ''tableta de chocolate'' pero son muchos también los que se preguntan si esta práctica es realmente sana.

En primer lugar tenemos que tener en cuenta que el ayuno suele ser de unas 8-10 horas y las reservas de hidratos de carbono son bajas, excepto si hemos cenado hidratos de carbono de bajo índice glucémico. También debemos saber que en el ayuno el nivel de insulina es bajo y el músculo solo capta un 10% de glucosa mientras el sistema nervioso un 80%, ya que el cerebro lo necesita para su correcto funcionamiento y las reservas son bajas.

Sabiendo esto no esta de más, media hora antes, tomarse un zumo o una tostada para evitar una hipoglucemia, que se provocaría porque los músculos demandarían parte de los hidratos de carbono del sistema nervioso.

¿Cuál sería la forma más sana para correr en ayunas?

Al correr en ayunas podemos quemar más fácil los ácidos grasos, puesto que las reservas de hidratos de carbono son bajas. Pero debemos saber que la obtención de energía de los ácidos grasos (su metabolismo) es mucho más lento que el de los hidratos de carbono, ya que su estructura molecular tiene mas carbonos. Por lo cual tenemos que tener en cuenta la duración de la carrera y la intensidad, puesto que también se van a quemar aminoácidos(músculo)porque el cuerpo necesita más formas de obtención de energía.

Entonces la duración más óptima del ejercicio sería de unos 20 a 45 minutos para evitar llegar a quemar músculo, puesto que cuanto más tiempo corres menos fuentes de energía tienes y el cuerpo tendrá que ''sustentarse'' de sus propias proteínas.

La intensidad es muy importante respetarla, ya que si corremos a una alta intensidad, el cuerpo necesitará energía de forma inmediata y ya dijimos que las grasas de metabolizan lentas, por lo cual el cuerpo utilizaría otra fuente de energía. Es decir, correr a una intensidad suave sería lo más adecuado pudiendo quemar más porcentaje de grasa.

¡Recuerda correr con precaución, no todos reaccionamos igual a esta práctica!